martes, julio 14

océnao

Seres oceánicos, de inmensos recovecos, en los cuales me sumergiría y me dejaría arrastrar corriente abajo, sólo por la curiosidad de saber por dónde podrán desembocar todas esas vertientes. Seres infinitos, creo que los hay, de aquellos en los cuales nunca se tiene la certeza de haberlos recorrido por completo, de los que en cada vez que creo acercarme, me alejo más. Seres multiformes, tal vez, ¿En incesante búsqueda de un disfraz? No, de esa conclusión prefiero prescindir. No podría ser un disfraz lo que los hace variar.
Hablo de los seres cuya naturaleza entraña algo más profundo, algo que los empuja a mudar constantemente de actitud, que es desconocido por todos y que no podemos saber. Y este saber que no se puede saber es lo que me lleva a sumergirme hasta el ahogo en sus aguas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario