miércoles, diciembre 30

Está de vuelta, y puedo sentirlo.

Niego, niego todo lo que me pasa. Y sé que lo estoy haciendo. Sé que tal vez algo me esté pasando. Pero lo reconozco, no es nuevo. Está volviendo, y puedo sentir cómo se está apoderando de mí. Cómo poco a poco, voy recobrando viejas costumbres y hábitos, que no hace falta aclarar que son malos, y bastante.
Lo oculto, lo escondo, lo confundo, lo mezclo, pero sé que finalmente está ahí, porque puedo sentirlo, tan presente en mis pensamientos como en ese entonces, puedo verlo a través de mis respuestas, a través de mis sueños puedo ver los estragos que causa en mi cabeza y en algún momento saldrá a relucir, como la única verdad, o por lo menos, la única importante.
Pero ya es tarde, y nada puedo hacer para cambiarlo, mas tampoco quiero realmente hacerlo.
Me duele, pero al mismo tiempo, me hace feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario